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LA EXPLOSION DE LOS ARSENALES DE RIO TERCERO
Resonante caso judicial en Argentina en una importante etapa pericial.
(12/12/1998)
En orden de singularidades la investigación del suceso aporta un nuevo
episodio que no pasa desapercibido. La Gendarmería Nacional convocada
por el juez federal que entiende en la causa para la realización de nuevas
pericias técnicas y químicas se excusa de participar. La razón, falta de
presupuesto para afrontar la tarea.
La dantesca explosión de los polvorines ocurrida a fines de 1995 esta siendo
sospechada de intencional y hasta que tomó estado público
una investigación paralela sobre el tráfico ilegal de armas a los Balcanes
ambos episodios estaban lejos de vincularse. Ahora sobre pistas firmes la
investigación viene avanzando en esa peligrosa dirección.
La simple posibilidad de considerar que la destrucción premeditada de los
polvorines, con un costo milagrosamente exiguo de 7 muertos, graves
daños en las instalaciones, la destrucción de la municion acumulada y
millonarios estragos en la urbanización civil lindera con los arsenales
lo haya sido con el propósito de hacer desaparecer evidencias comprometedoras
permiten sospechar la magnitud de los intereses amenazados.
El aporte de la Gendarmería Nacional.
La Gendarmería Nacional ha preservado
hasta ahora la credibilidad de sus dictámenes periciales, contrapuestos
en diversas ocasiones con los de otras reparticiones en casos de resonancia.
Las dificultades invocadas sugieren que las mismas quizas no sean ajenas a
su determinacion de seguir preservando esa credibilidad.
En todo caso su aporte hasta el presente no ha sido menor; una pericia técnica
anterior dictaminó un faltante de 31.000 proyectiles sobre las existencias
declaradas por Fabricaciones Militares al momento de producidos los hechos.
Para mas datos esta última dependencia esta siendo investigada ademas por
la emisión de un dictamen pericial inexacto y eventualmente doloso aportado
a la justicia en la misma causa.
La simple posibilidad de considerar que la destrucción premeditada de los
polvorines, con un costo milagrosamente exiguo de 7 muertos, graves
daños en las instalaciones, la destrucción de la municion acumulada y
millonarios estragos en la urbanización civil lindera con los arsenales
lo haya sido con el propósito de hacer desaparecer evidencias comprometedoras
permiten sospechar la magnitud de los intereses amenazados.
La Gendarmería Nacional ha preservado
hasta ahora la credibilidad de sus dictámenes periciales, contrapuestos
en diversas ocasiones con los de otras reparticiones en casos de resonancia.
Las dificultades invocadas sugieren que las mismas quizas no sean ajenas a
su determinacion de seguir preservando esa credibilidad.
En todo caso su aporte hasta el presente no ha sido menor; una pericia técnica
anterior dictaminó un faltante de 31.000 proyectiles sobre las existencias
declaradas por Fabricaciones Militares al momento de producidos los hechos.
Para mas datos esta última dependencia esta siendo investigada ademas por
la emisión de un dictamen pericial inexacto y eventualmente doloso aportado
a la justicia en la misma causa.
Referencias: Clarin del 12 de diciembre de 1998.
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Fuente: Cnn.com
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